Un factor clave para la adaptación de las construcciones de nuestras generaciones futuras es la resiliencia ante los cambios climáticos. Por lo tanto, es fundamental reducir el impacto ambiental de nuestras edificaciones actuales y disminuir la dependencia de recursos no renovables. En este sentido, la madera tratada ha sido reconocida internacionalmente como un material alternativo eficaz para enfrentar el cambio climático.

Este material se destaca por su resiliencia. Además, es capaz de soportar alteraciones provocadas por terremotos, viento y plagas, siempre que haya recibido un tratamiento de preservación adecuado. Gracias a su adaptabilidad, la madera tratada puede ser transportada fácilmente y es reciclable, lo que permite su uso en nuevas construcciones o reparaciones. Así, esta versatilidad la convierte en una opción ideal, ya que también puede ser transformada y utilizada como combustible, procedente de un recurso renovable.

A través de un aprovechamiento responsable de los recursos forestales, Ecomadera demuestra su compromiso con la regeneración de la energía renovable de estos materiales. De esta manera, garantizamos su disponibilidad para las generaciones futuras. Las fases principales para llevar nuestros productos de madera tratada dimensionada al mercado nacional están respaldadas por nuestra experiencia en manejo forestal, la cadena de producción, la cadena de suministro y la regeneración del bosque.

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